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24.6.13

QUÉ ES LO QUE PASA PARA QUE EXISTA EL IDIOTISMO Y LA LOCURA

─ ¿Es cierta la opinión según la cual los cretinos e idiotas ─conocidos como bobos─ tienen un alma de naturaleza inferior?

No; tienen un alma humana, con frecuencia más inteligente de lo que creéis, y que sufre por la insuficiencia de los órganos que le sirven de medio para comunicarse, tanto como sufre el mudo porque no puede hablar.

─ ¿Qué objeto tiene La Providencia, creando seres desgraciados como los cretinos e idiotas?

Los espíritus que viven en los cuerpos de los idiotas sufren un castigo. Estos espíritus padecen a consecuencia de la contrariedad que experimentan, y por su impotencia en manifestarse por medio de órganos no desarrollados o imperfectos.

─ ¿No es, pues, exacto decir que los órganos no influyen en las facultades?

Jamás hemos dicho que los órganos no influyen; influyen, y mucho, en la manifestación de las facultades; pero no las origina. He aquí la diferencia. Un buen músico con un instrumento malo no ejecutará bien; lo cual, sin embargo, no le privará de ser un buen músico.

─ ¿Qué mérito puede tener la existencia de seres que, no pudiendo hacer ni mal ni bien, como los idiotas y los cretinos, no pueden progresar?

Es una expiación o castigo impuesto al abuso que hayan podido hacer de ciertas facultades. Es un tiempo de espera.

─ Así, pues, el cuerpo de un idiota, ¿puede albergar u espíritu que haya animado a un hombre de genio, en una existencia anterior?

Sí, el genio se convierte a veces en calamidad, cuando, con malos propósitos, abusa de su buena inteligencia.
La superioridad moral no siempre está en proporción o al nivel de la intelectual, los más grandes genios pueden estar cometiendo malas acciones y dejando a su paso mucho por expiar o pagar. De aquí procede a menudo que tengan que sobrellevar una sufrida existencia de nivel inferior a la que ya han vivido. Las trabas que encuentra el espíritu para sus manifestaciones son como cadenas que dificultan los movimientos al hombre vigoroso. Puede decirse que el cretino y el idiota están lisiados en la manera de manifestarse el cerebro, como el cojo de las piernas y el ciego de los ojos.
─ ¿El idiota tiene en estado de espíritu conciencia de su estado mental?

Sí, muy a menudo. Comprende que las cadenas que dificultan su vuelo son una prueba y una expiación o castigo.

─ ¿Cuál es la situación del espíritu en la locura?

El espíritu en estado de libertad recibe directamente sus impresiones y directamente ejerce su acción en la materia; pero encarnado se encuentra en condiciones muy diferentes, y tiene la necesidad de hacerlo siempre con la ayuda de los órganos. Si una parte del conjunto de estos órganos está alterado, su acción o sus impresiones, respecto de aquellos órganos, están interrumpidas. Si pierde los ojos, se queda ciego; si son los oídos, sordo, etc. Imagina ahora que el órgano que preside los efectos de la inteligencia y de la voluntad está parcial o completamente atacado o modificado, con esa imaginación te será fácil el comprender que, no teniendo a su disposición el espíritu sino órganos incompletos o dañados, debe resultar una perturbación de la que el espíritu por sí mismo, y en su fuero interno, tiene conciencia perfecta; pero cuyo curso no puede por sí mismo detener.

─ Entonces el que está desorganizado, ¿es siempre el cuerpo y no el espíritu?

Sí; pero es preciso no perder de vista que, del mismo modo que el espíritu obra en la materia, esta reacciona sobre aquel hasta cierto punto, y que el espíritu puede encontrarse impresionado momentáneamente por la alteración de los órganos por cuyo medio se manifiesta y recibe sus impresiones. Puede suceder que a la larga, cuando ha durado mucho la locura, la repetición de los mismos actos concluya por tener en el espíritu una influencia, de la que no se libra, hasta su completa separación de toda impresión material.

─ ¿De dónde procede que la locura arrastra a veces al suicidio?

El espíritu sufre por la violencia que experimenta y por su impotencia para manifestarse libremente, y por esta razón busca en la muerte un medio de romper sus ligaduras.

─ El espíritu de la persona que muere y que en vida sufría de locura, ¿se resiente, después de la muerte, del desarreglo de sus facultades?

Puede resentirse durante algún tiempo después de la muerte, hasta que esté completamente desprendido de la materia, como el hombre que recién se despierta se resiente durante unos minutos de la turbación en que le tenía el sueño.

─ ¿Cómo puede la alteración del cerebro reaccionar sobre el espíritu, después de la muerte?

Es un recuerdo. Un peso gravita sobre el espíritu, y como no ha tenido inteligencia de todo lo ocurrido durante su locura, le es preciso siempre cierto tiempo para ponerse al corriente. Por esto, mientras más ha durado la locura durante la vida, más dura la molestia, la violencia después de la muerte. El espíritu desprendido del cuerpo, se resiente algún tiempo de la impresión de sus ataduras.