─ El presentimiento, ¿es siempre una advertencia del
espíritu protector?
El presentimiento es el consejo íntimo y oculto de un
espíritu que os quiere bien. Se halla también en la intuición de la elección
que se ha hecho; es la voz del instinto. El espíritu antes de encarnarse, tiene
conocimiento de las principales fases de su existencia; es decir, de la clase
de pruebas a que se compromete. Cuando tiene un carácter predominante, el
espíritu conserva una especie de impresión de una prebenda interna, y esta
impresión que es la voz del instinto, acentuándose cuando se aproxima el
momento, se convierte en presentimiento.
─ El presentimiento y la voz del instinto tienen siempre
algo de vago, ¿qué debemos hacer en la incertidumbre?
Cuando estés incierto, invoca a tu espíritu bueno, o suplica
al señor de todo, a Dios, que te envíe a uno de sus mensajeros; es decir, a uno
de nosotros.
─ Las advertencias de nuestros espíritus protectores,
¿tienen por objeto único la dirección moral, o también la conducta que debemos
observar en las cosas de la vida privada?
Todo, pues procuran hacernos vivir lo mejor posible; pero a
menudo vosotros cerráis el oído a las buenas advertencias, y son infelices por
culpa vuestra.
Los espíritus protectores nos ayudan con sus consejos por medio de la voz de la conciencia, que hacen hablar dentro de nosotros; pero como no siempre la damos la necesaria importancia, nos los dan en forma más directa, valiéndose de las personas que nos rodean. Examina cada cual las diversas circunstancias felices o infelices de su vida, y verá como en muchas ocasiones ha recibido consejos que no siempre ha puesto en práctica y que, de haberlos escuchado, le hubiera evitado muchas desazones.
